Hubo un momento en que Windows y Linux se consideraban rivales feroces y los dos realmente no podían sostenerse, pero Windows 10 intervino para cambiar todo.
No solo eso ahora es posible ejecutar Linux sobre Windows 10, sino que muchas aplicaciones de Linux también están migrando al mundo de Windows 10 para una experiencia multiplataforma.
Las aplicaciones de KDE son particularmente populares en Windows 10, ya que varias están disponibles en la tienda de Microsoft, y más recientemente, otro gran nombre aterrizó en el sistema operativo de Microsoft que promete la misma experiencia que en Linux.
Elisa, que es “un reproductor de música moderno y hermoso hecho con amor por KDE”, como se lee en la descripción oficial publicada en la tienda, ahora está disponible en la tienda de Microsoft, por supuesto, con una licencia gratuita. La aplicación es obviamente de código abierto, y se supone que lee casi cualquier archivo de audio en un dispositivo con Windows 10, al igual que su hermano Linux.Kate y Okular lideran el empuje de Windows
Otras aplicaciones de KDE listadas para descargar en Microsoft Store también son particularmente exitosas, y KDE dice que el editor de texto Kate y la aplicación de lector Okular son las dos que disfrutan del mayor éxito. Los datos proporcionados por KDE nos proporcionan una visión más cercana de cómo están funcionando sus aplicaciones en Windows 10:
- Kate – Editor de texto avanzado – 23,524 adquisiciones
- Okular – Más que un lector – 16,154 adquisiciones
- Filelight – Visualizador de uso de disco – 1.412 adquisiciones
- KStars – Software de astronomía – 1.400 adquisiciones
- Kile – Un editor de TeX / LaTeX fácil de usar – 1,343 adquisiciones
- Elisa – Reproductor de música moderna – 40 adquisiciones
KDE dice que cualquiera puede ayudar a traer más de sus aplicaciones a Windows 10, y el equipo se vincula a un tutorial en profundidad donde los desarrolladores pueden obtener más información sobre cómo crear una nueva aplicación y enviarla a la Tienda Microsoft.
Al final del día, sin embargo, una cosa está clara: Linux y Windows son ahora dos mejores amigos modernos, y es poco probable que esto cambie a corto plazo.